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Cordillera

Las perforaciones que atraviesan la cordillera son bocas cubiertas de barbas verdes. Acá la selva se traga todo.

Lo que hiciste hoy, dentro de veinte años no tendrás rastro, sea piedra que brota del suelo o concreto que como cicatriz queda sobre las heridas al paisaje.

Para mí el «Pacífico Mágico» es el poder fértil, silencioso, lento e implacable que otorga toda el agua que fluye de las paredes, suelos y cielos.

Agua y monte que borran cualquier rastro violento, humano y animal, sobre el camino.

Quizá si se queda lo suficientemente detenido, las plantas y palmas del cuerpo se volverán verdes al fin.